domingo, 29 de mayo de 2011

5º Día de viaje - Russell - Paihia- Whangarei - 71 kms. - 27.05.11

Una foto de la playa de Paihia desde la casa de Paitangi.


Como dice el refrán despues de la tormenta viene la calma y como me había asegurado la mujer del camping el día amanece precioso.
Hoy tenemos que levantarnos tempranillo porque tenemos que coger el ferry de nuevo para cruzar hasta Paihia donde hemos quedado con Paitangi a las 9.30 am, en cuanto sálimos del camping empezamos a hacer fotos y en un momento llegamos al final de la carretera donde nos espera el ferry que en 5 minutos te cruza de un lado al otro de este canal.

La campervan recien cargada en el Ferry y camino del otro lado.

Las vistas son magníficas y nos montamos todos en la parte de adelante de la campervan para poder ver bien todo, pero como he dicho el viaje es muy corto y pronto hay que volver cada uno a su sitio.
Desde Opua, donde te deja el ferry, hasta Paihia hay unos 10 minutos y los hacemos muy rápido ya que conocemos la ruta; llegamos a Paihia antes de tiempo y decidimos ir al supermercado antes de ir a casa de nuestra amiga.

Mañanitas de niebla, tardes de paseo...

A las 9.25 estamos en la puerta de la casa de Paitangi o Pai, vive en una casa preciosa a escasos 20 metros de la playa; ella todas las mañanas se va a nadar e incluso ha cruzado varías veces los 3 kms. que separan Russell de Paihia.

Bajamos de la campervan y vamos a saludar a Pai, nada mas bajar podemos verla en su estudio situado en lo que sería el garage de la casa, esta preparándolo todo; el estudio es genial porque tiene como un sillón de dentista mirando al mar. El estudio esta lleno de carvings o maderas talladas con formas y motivos maoris, todas hechas por ella y tiene varios sofas para sentarte, relajarte y charlar con ella acerca de toda tu vida.

Noah y Zoe, jugando por el estudio de Pai.


Bueno, os voy a situar un poco porque estareís un poco perdidos; Paitangi, es una afamada tatuadora maori, la cual pudimos conocer gracias al contacto de Xabier Villanueva un escritor amigo que tiene un blog que seguimos mucho :”Como ser un kiwi y no morir en el intento”.
Pai, ha dado varías conferencias acerca de la cultura del Ta Moko y además ha hecho varías giras por Europa para hacer tatuajes y explicar su cultura.
En poco tiempo se ha hecho con una mas que merecida fama y por suerte para nosotros pudimos contactar con ella atraves del facebook, contarle nuestra historia y pedirle que nos hiciera un Ta Moko acerca de nuestra vida familiar, el viaje y nuestro amor.
Ella accedió y cogimos una cita después de muchos mensajes atraves del facebook para este día, y parece que nos iba a ir bien porque para empezar la tormenta había desaparecido y teníamos un sol precioso.

Mientras Ana estaba en el estudio, nosotros nos fuimos a jugar  a la playa.

Cerca de la casa había una esplanada con los símbolos de todos los jefes de las tribus Maori de NZ.


Entramos en su estudio y hacemos las presentaciones, Pai luce un impresionante Ta Moko en su boca; el cual simboliza un buho y varios animales más, y también informa de que ella es una persona que transmite la cultura de su pueblo.
Primero, nos sentamos en los sofas y hablamos durante un buen rato sobre todo el viaje, nuestras experiencias y nuestros sentimientos; Noah y Zoe no pararon de jugar con todas las cosas que tenía por el estudio, tiene dientes de ballena, costillas de ballena y muchos mas huesos de mamíferos marinos que utiliza Pai para hacer esculturas talladas.

El boceto que le hizo a Ana para ver si le gustaba, como veis la forma es de remo.

El arte del Ta Moko se basa en trasnmitir tus vivencias y tus sentimientos acerca de lo acontecido en tu vida a la piel en forma de metáforas en forma de dibujos; lo primero es hablar mucho con la artista a modo de psicologa y contarle todo lo que es y ha sido importante para ti a lo largo de tu vida.
Despúes de un bune rato de charla y de que Pai tome sus notas, te pasa al sillon y te hace un boceto con rotuladores en la piel; localizado donde tu quieres y con las dimensiones que tu deseas, ella crea un diseño único basado en tu historia y las cosas que tu mas quieres.

Nuestra Paitangi en plena faena, que buen recuerdo ahora que lo veo desde lejos.

Antes de empezar el proceso de tatuado nos ha explicado que tiene que rezar a los dioses Maoris para pedirles permiso y explicarles lo que va a ser tatuado; al mismo tiempo nos ha pedido permiso para cantar una canción en memoria de mi padre para pedirle a los guardianes y guerreros maoris que cuiden de mi padre; la canciñon ha sido increíble, a parte de lo bien que canta Pai, la canción ha sido muy bonita y conmovedora ( los pelos de punta y los cuatro callados escuchándola sin mover una pestaña....).

Esta es la Waka, y en la parte de atrás lleva como un timón invertido para evitar los balanceos.

El diseño de Ana simboliza un remo de la “Waka” o canoa de viajes de la cultura Maori, simboliza el largo viaje que hemos hecho tanto sentimentalmente como pareja y familia, como fisicamente viniendo en familia hasta New Zealand.
Paitangi ha tardado en tatuar a Ana una hora mas o menos y ahora me toca a mí, mientras su hijo limpia la mesa de trabajo de todo lo que ha utilizado con Ana; ella y yo nos sentamos en el sofa a charrar sobre mi vida, lo primero que le explico es lo bueno que fue para mi conocer a Ana y luego lo malo que ha sido la muerte de mi padre. Le explico que mi padre ha sido mi guía en la vida y que es una pieza especial en mí al igual que mi madre.
Sin olvidarme de lo mejor mis dos corazones, Noah y Zoe; que ahora llevo en mi piel anclados a mi para siempre en unos trazos de tinta inborrable, como mi amor por ellos.

Pero bromas a parte, el dibujo hecho por Pai es precioso y tras hacer el boceto en la piel iniciamos el proceso doloroso; empieza con una primera pasada con una aguja gorda para hacer el contorno que duele un montonazo, una segunda pasada por todo con una aguja mas fina y otra máquina distinta y una tercera pasada con una multipuntas que es la peor de todas.........AHHHHHH¡¡¡¡¡


El resultado es genial y lo llevamos como un tesoro.
Pai hace también el Ta Moko tradicional con las chisel, que son las agujas tradicionales hechas con huesos de pajaros y otros animales; pero en esta forma el tatuaje puede durar el doble o a veces el triple de tiempo y aunque me hubiera gustado ahcerlo así no puede ser por el problema de agenda que tenemos.

La nota divertida la pusó mi hermano ya que el lugar escogido por Pai para simbolizar a mi hermano es una parte del brazo que duele un montonazo, y nos reíamos cada vez que lanzaba un OUCHH...., Pai me decía hay que ver tu hermano lo que te hace sufrir .....
Los chicos se han portado genial jugando por allí y hablando con Pai de vez en cuando, al final nos hemos hecho todos una foto juntos y Pai se ha despedido muy cariñosa de Noah y de Zoe, deseándonos un buen viaje y diciéndonos que tenemos unos hijos preciosos y encantadores.

Después del trabajo una foto para el recuerdo y unas despedidas.

Tras dejarle una donación en su calabaza ya que ella no cobra por su trabajo y volvernos a despedir, nos dirigimos a Waitangi para ver el sitio donde se firmó el polémico tratado entre los Maori y los ingleses; polémico porque los ingleses le dieron la traducción que quisieron al tratado......

En el parking de este sitio tan histórico nos comemos unos macarrones con tomate en conmemoración del día de sufrimiento que hemos llevado en cada de nuestra amiga Pai.
De este lugar tan importante para los Maori ponemos rumbo a Whangarei, a 71 kms. y una hora larga de campervan; son las 5 de la tarde y los chicos se echan una siesta, cosa que aprovechamos para hacer camino y pegarnos el atracón para recuperar el tiempo que hemos estado parados.

Al día siguiente descansaremos e iremos a ver las cascadas que ahí en Whangarei y dar una vuelta por el pueblo....


La playa de Paihia con Russell al fondo detrás de estas islas.

GRACIAS A PAITANGI, POR HABERNOS DADO LA OPORTUNIDAD DE PODER DISFRUTAR DE SU CULTURA Y HABERNOSLO TRANSMITIDO TAN BIEN.

1 comentario:

  1. Muchos son los recuerdos que se agolpan al volver a ver lugares donde, como vosotros, yo también he sentido como míos.

    Esta es una de las zonas más especiales de Nueva Zelanda, sobre todo si se visita después de haber vivido un buen tiempo en la isla.

    Whangarei, Paihia. Saben diferente, se disfrutan diferente.

    Estoy seguro de que no os arrepentiréis de vuestros Ta Moko, menos aún después de haber conocido a una persona tan cercana.

    Veo que al final ha llegado el fin de vuestro viaje. No os preocupéis, pensad que será el comienzo. Al fin y al cabo, tras Nueva Zelanda se inicia una nueva vida.

    Saludos familia!

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