martes, 26 de octubre de 2010

Día 21 – Franz Josef – Fox Glacier

Día 21 – Franz Josef – Fox Glacier
                                            Vistas desde la cama de la campervan

Amanece una mañana preciosa y nada mas bajar de la campervan puedo observar que desde nuestra ventana, empañada por el calor del radiador que hemos tenido toda la noche encendido, se puede divisar toda la cadena de picos que tenemos alrededor de los glaciares; entre ellos el majestuoso Mount Cook.
Nos tomamos un generoso desayuno y nos ponemos en marcha hacia la base del glaciar Franz Josef, en la recepción del camping la muchacha me ha explicado que hay un paseillo desde el parking a la lengua del glaciar de 1 hora y media; nos da un poco de miedo por si Noah y Zoe no quieren andar todo el camino; pero no hay mas remedio para poder llegar, habrá que sufrir.
Comienzo de la ruta del glaciar....

El camino empieza por un sendero de bosque tropical hasta que cogemos el cauce del rio hasta el mismo frente del glaciar; es un trekking bestial, precioso, asombroso, sin palabras.....
Noah y Zoe se lo hacen entero sin parar y jugando, son unos campeones.
                                            A mitad de camino al glaciar..........
                                             Desafío conseguido, la familia llega a la cima

Llegamos al frente y estamos un ratito observando el hielo azul, foto familiar de rigor y demás fotos de los alrededores y nos volvemos de nuevo al camino de vuelta.
El glaciar Franz Josef, una preciosidad....
A todo esto comentaros que hay un tráfico de helicópteros desde el pueblo al glaciar bestial, hemos visto en el camino mas helicópteros que en toda nuestra vida juntos; la idea es que te dan una vuelta por los dos glaciares e incluso aterrizan en la fase superior del glaciar para que te hagas una foto en el hielo, como siempre la “pela” es la que manda, según te gastes más azúcar tienes.
                                             Subir dos glaciares en un día, era mucho andar; nos hemos buscado un medio
                                               de transporte alternativo.
Después de llegar a la campervan nos vamos camino del Lago Matheson, a unos 30 kms. de Franz Josef y unos 6 kms. de Glacier Fox, llegamos al lago y aparcamos al lado de la única construcción del lugar, como no un restaurante, bar y gift shop; todo de super diseño y un restaurante con varios premios gastronómicos.
Empezamos la caminata al lago con el carro, para que Noah y Zoe no anden; pero a la mitad del camino nos damos la vuelta porque según el cartel hay una hora y media de ida y vuelta.
Ok, Roger comandante;we are ready to fly.

Nos volvemos y comemos en la campervan, un cafetito en el café Matheson, un poco de internet y proseguimos a Glacier Fox para ver de contratar un helicóptero y hacer un vuelo sobre el glaciar Fox.
Llegamos al pueblo y vamos directamente a una de las tiendas donde se puede contratar un vuelo, el chico que nos atiende es muy simpático y nos comenta que en diez minutos si queremos estamos sobre el glaciar.
El vuelo es para la familia sola, nos arregla el precio un poco y nos informa de que la visiblilidad del vuelo va a ser buena; a si es que no lo pensamos mas y nos vamos a volar.
parte de las cuencas del glaciar Fox
Crestas de hielo, vistas desde el helicóptero.
El mismo muchacho nos lleva hasta el hangar en su coche y nos da las últimas instrucciones antes de subir al helicóptero, el piloto ya esta dentro calentando el motor y subiendo las revoluciones.
A Noah le cambia la cara cuando el piloto le dice que suba delante, a si es que las chicas se nos adelantan y Zoe se cuela delante al lado del piloto y Mami al lado de la puerta; por nuestra parte, los chicos quedamos relegados a la parte trasera.
La copiloto Zoe, antes de despegar.
                                           
En seguida nos dan los cascos para podernos oir cuando nos hablamos y no oir el ruido ensordecedor del rotor principal.
En nada ya ha calentado el motor y estamos despegando, un despegue bestial hacía detrás y subiendo rápido; enfilamos rumbo hacía la base del glaciar Fox y pronto vemos las colas de gente que sube andando a la garganta de la montaña.
El vuelo va bien, alguna turbulencia y algún coleo de la parte de atrás del helicóptero, pero todo controlado; son unas vistas asombrosas, las crestas de los choques de hielo azul del glaciar, los laberintos de hielo, las grutas esculpidas por los arroyos azules de agua....... increibleble.
Llegamos a la cima del glaciar donde se acumulan miles y miles de toneladas de nieve y hielo, es impactante divisar allí un grupo de personas que están esperando otro helicóptero y además se nota que han pasado noche por la zona porque van con muchas mochilas y equipo.
El piloto nos explica que nos va acercar a una laguna que hay en la otra cima y luego nos hará una pasada con vuelo circular por la caida de la catarata Victoria, que atraviesa el glaciar; bueno no puedo explicaros lo que vimos con palabras y por desgracia las fotos no dan fe de lo precioso que fue....Sorry.
A todo esto, llevo un rato luchando con Noah que se ha quedado grogui y se esta durmiendo; el piloto nos comenta que es muy normal y que les suele pasar a los niños, con las turbulencias, el ruido y el calentorcito se duermen pero como si fuera un somnífero.
Noah se queda dormido sin remedio

Empezamos la bajada hacia el pueblo, el piloto nos va explicando más cosas y nos va acercando bastante rápido hacia la zona de aterrizaje donde nos espera su compañero con el coche para volvernos a llevar a la campervan.
Tras el subidon de adrenalina ponemos rumbo de nuevo a Franz Josef, nada más llegar nos dirigimos a la única calle comercial del pueblo y aparcamos para tomar Noah y Zoe un helado de chocolate en una cafetería, damos un paseo de shopping por la calle y encontramos una pedazo de terraza con vistas al glaciar y con el mono de cerveza que llevamos; pues imaginaros, sucumbimos al devenir y nos tomamos unas heinekens con su respectiva tapa de patatas con chilly pilly (picante) y los nenes unas pedazo de burguer que están buenísimas. Os explico un poco la situación, la terraza esta mirando a la montaña y la mesa esta rodeada por unos sofás con cojines y mantas; la mesa tiene en el centro una estufa de fuego para dar calorcito y tan agustito las cervezas caen varias, es un sufrir como diría el gran filósofo Job ( a cual queremos mucho.....) y recordamos con cada birra.
Que buena terraza con vistas al glaciar,,,,, un sufrimiento.

Después de esta delicatessen nos vamos al camping a dormir y poner unas lavadoras.

Parte del camino de subida al glaciar.
Restaurante, tienda del Lake Matheson

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