lunes, 24 de enero de 2011

La semana pasada nos quedaba sin completar - 20.01.11

No tengo mucho animo para escribir pero solo pienso en mi madre y se que es nuestra seguidora número uno, y no quiero dejarla sin noticias de nosotros; pero me gustaba pensar que lo leyeran los dos juntos y se rieran de nuestras tonterías y experiencias, ese era nuestro proyecto cuando empezamos con el blog.
MAMI, TE QUIERO; MEJOR DICHO TE QUEREMOS.... UN BESAZO, ESTO LO SIGO POR TI.

Nuestra playa de adopción, vista desde los rompientes.

El jueves nos fuimos por la tarde a nuestra playa del Mount Maunganui, llevamos varios días nublados y en cuanto vimos un rayo de luz nos lanzamos a la playa aunque fuera a pasear.
Lo primero fue un helado, como no¡¡¡¡ es nuestra pasión en esta playa y luego engañamos a Noah con que nos acercabamos a la playa del rompiente para explorar los acantilados y luego poco a poco dimos la vuelta al monte Mauao (Maunganui) 2.9 kms. andando los campeones.

Bajada a los rompientes y una pequeña playita o cala.

La bajada a la playa es muy bonita y en la playa te puedes quedar todo el día cogiendo conchitas y diciendo mira que chula, mira que chula y llenar una bolsa entera..
En los rompientes de las olas hemos estado viendo como una mama gaviota alimentaba a un polluelo que era tan grande como ella pero con plumaje oscuro.

Mis preciosidades dando belleza al paisaje.

Los polluelos no nos tienen miedo pero la mama en cuanto nos acercamos se va corriendo, a si es que nos alejamos un poco y nos subimos a un rompiente para verlo desde lejos.
En el rompiente aprovechamos para tomar unas fotos de la playa y unas nuestras.
Continuamos camino por la playa hasta una piedra con forma de Kiwi (según los Kiwis, pero que no se parece en nada) que le gusta mucho a Noah y Zoe y tras encaramarnos a ella vemos en el agua lo que nos parece un polluelo de gaviota nadando entre las olas he intentando salir a la playa.

La mama gaviota con su polluelo, ella le regurgita la comida para que se la coma.

De primeras hemos pensado que se iba a ahogar y he empezado a buscar un lugar desde donde poder cogerlo pero luego he visto que era el que se sumergía cuando venía la ola para evitar la envestida, esto me ha hecho sospechar que podía ser un pingüino y la alegría ha sido monumental cuando lo hemos visto llegar a la playa a escasos metros de nosotros y salir andando (con su característico estilo) buscando tierra firme y algún sitio donde pasar la noche.

Una foto con mi bomboncico, que tiemble su novio.....

Los pingüinos según nos comentaron en la isla sur (donde no pudimos ver ninguno) salen por la mañana a pescar y vuelven por la tarde noche a sus nidos en la hierba alta para descansar hasta que el sol despunta y vuelven al agua.

La cala escondida, una preciosidad como puedes ver....

Al salir el pingüino del agua y llegar a nuestra altura nos hemos acercado demasiado y ha empezado a ponerse nervioso, por nuestra culpa ha cambiado de ruta y se ha querido encaramar por una grieta que había en una pared para pasar al otro lado de la playa; pero este camino es un poco peligroso para él porque tiene el culo muy gordo.

Nuestro pequeño amigo.....

Le intento hacer cambiar de ruta e intento cogerlo para dejarlo en las hierbas pero no veas como se me lanza estufando como los gatos, y de verdad que me hizo retroceder; si me engancha un dedo con ese pico me habría hecho pupa seguro.

Lo teníamos acorralado al pobrecico, pero es que somos de pueblo y era la primera vez.

Al asustarse un poco más siguió su escalada por la grieta y como os decía antes se le quedo el culo enganchado y ni para arriba ni para abajo; así es que me toco buscar un palo y ayudarlo empujándolo del culete, hasta que lo desatasque y lo conduje a un lugar seguro donde lo dejamos tranquilo para que buscara un sitio para pasar la noche y que ningún turista le molestara más.

Esta foto es el claro ejemplo de un eclipse de belleza; esto sucede cuando una persona tan preciosa 
como esta eclipsa un paisaje tan maravilloso como el de detrás.

Sin palabras... menudo trío.

Tras esto seguimos la marcha engañando a Noah para dar la vuelta al monte, en el próximo banco paramos a descansar; en este Papi? no en este no que no hay sol en el siguiente y en el siguiente, en el otro que hay unos pescadores y los vemos a ver si pescan ......... así hasta que vemos un barco carguero pasando por el canal que nos ayuda a convencerlos para ver si llegamos al puerto antes que el barco.
En el trayecto estamos viviendo una preciosa puesta de sol y la salida de una luna llena preciosa.

Mirar que buen sitio para un picnic.......

Este barquito nos dio un susto porque no lo vimos venir y nos lo encontramos por sorpresa entre los 
arboles y pitándonos con las trompetas entre el canal.......


La puesta de sol desde la base del Monte Mauao.


La vuelta al monte la terminamos en unos columpios que hay en unos arboles al final del recorrido, unos columpios muy grandes y con un recorrido muy largo; un poco caseros pero muy divertidos para todos los niños que pasan por este lado del monte Mauao.

Como un angelico de esos que hinchan los carrillos en los cuadros de Murillo....

Los columpios, buena estrategia para llegar hasta el final del camino.

Al final se nos echa la noche encima y nos toca correr para no llegar muy tarde a casa .......

Bueno, otro semana y seguimos.........

No hay comentarios:

Publicar un comentario